¡No te puede gustar ÉL! Cap. IV

Ha pasado ya la primera semana de licencia de Inari y se nota que está mejor. Se levanta de la cama y hace bromas. Es un chico muy simpático y de trato fácil. Conversamos fluidamente en chino mientras corrige algunas palabras que no puedo pronunciar. Ninguna persona sabe de estos ratos de conversación, ni nada. 
-        Anaís, siéntate a mi lado, siempre estás lejos. – dice Inari, lo observo en silencio, su actitud y vibra emanan coqueteo. 
Que hago ahora, él es tan agradable, tan genial… que voy y me siento a su lado, me muestra fotos de su celular, de lugares en donde ha estado, trabajos que ha hecho y un sinfín de actividades… entonces se detiene y me mira.
  • ¿Crees que podríamos agregarnos a Line? – le devuelvo la mirada con sorpresa – Emm… la verdad es que me interesas bastante.

Esto es broma, esto pasa sólo en las historias y películas. El chico guapo y popular se fija en la desamparada, no me puede estar pasando, ¿acaso soy la protagonista?

  • ¿Qué dices? – insiste y se acerca más aún.
  • No, converso contigo porque me agradas y estamos los dos acá. Pero termina este trabajo y la realidad es que no podemos ser amigos.

Escucho los latidos de su corazón, porque solo hay silencio en la habitación. Se levanta en silencio y se recuesta en la cama.

  • Ningún problema. Podemos volver a como estábamos. Puedes retirarte. Quiero estar solo.

Este chico no resiste el rechazo. Pero no es mucho lo que puedo hacer por él. Mientras voy saliendo suena mi celular es Jian, hacia días que no me llamaba porque estaba con mucho trabajo. Mientras contesto escucho muy bajo un “quisiera ser la persona con la que vas a hablar ahora”

Todo vuelve a la normalidad, nada de conversaciones, nada de miradas ni mucho menos contacto físico. Que, si es mejor así, supongo, aunque me siento agotada, intento darme ánimos todos los días.

La rutina es la misma, hasta que me invitan a comer con el staff, compartir y conocer a los actores y todo el personal. No puedo rechazar la oferta, debo cuidar la alimentación de Inari, por lo que me siento a su lado y cuido que todo lo que le sirvan sean alimentos que pueda comer.

Todos comen y beben a destajo, incluso Inari, quien ya tiene el rostro ruborizado por el alcohol. Me hacen una seña para que me lo lleve a la habitación antes de que se ponga peor. Acepta sin reparo y en silencio me sigue… cuando estamos fuera de la vista de todos y él mirando hacia todos lados toma mi mano y camina en silencio. Intento soltarla, pero no me deja. Seguimos en silencio… hasta llegar a su habitación. Sin soltarme, entramos en la pieza. Nos sentamos en el sofá. Me mira y acerca su rostro al mío, me alejo inmediatamente.

  • Eeepaaa. Me iré ahora.
  • No te gusto ni un poco… hace mucho que no me atraía tanto alguien. Y tú ni luces de hacerme caso alguno.

Suspira y cierra los ojos, esta frustrado y me gusta, pienso que quizás si lo beso una vez me deje tranquila. Quiero besarlo la verdad. Me siento sobre él y tapo con mi mano sus ojos. Le susurro al oído: “esto nunca pasó” y lo beso. Parece un insípido beso de k-drama, hasta que abre su boca y meto mi lengua. Devuelve el beso un poco nervioso, pero sigue el ritmo. Siento el calor en mis mejillas y en su rostro. Sé que si continuamos así tendremos sexo, porque he comprobado que hay química y que nuestros cuerpos responden bien al del otro.

Me detengo en seco y me pongo de pie. Arreglo mi ropa y salgo de la habitación sin mirarlo. Mañana me arrepentiré de esto. Lo sé…

Fin Cap.4

¡No te puede gustar ÉL! Cap. III

Instalarse ha sido todo un caos, todos corren para muchos lados y yo debo preparar todo en los horarios que me han dado. Cumplo al pie de la letra las ordenes y no tengo más comunicación que la necesaria con Inari, con el staff de producción no tengo mucho contacto tampoco, pero he ido practicando mi chino con algunas personas que amablemente han entablado conversación conmigo. Eso sin converso mucho con Jian quien me da ánimos y me hace sentir menos sola. Creo que serán los 6 meses más largo de mi vida.

  • 谢谢… – dice Inari Wang mirándome directo a los ojos, su mirada es penetrante y siento que me escanea, esto me pasa todas las veces desde que trabajo con él. Sólo me retiro en silencio.

Desde lejos miro el rodaje, actúa endemoniadamente bien, en realidad todos lo hacen muy bien. Así pasan mis días, mientras no tenga que cumplir con mis horarios, estoy estudiando, mi rutina es bastante aburrida.

Al mes y medio de trabajo, Inari contrajo una gripe que lo mando a reposo, pero que no paró el rodaje, sino que sólo las escenas donde él actúa (que no son pocas). Ahí mi rol cambio, no sólo debía preocuparme de su alimentación, sino que también de sus remedios, fiebre y de su recuperación, acepté porque era más dinero, algo así como trabajo extra. Esto no hizo que variaran nuestros diálogos, pero si pasábamos mucho más tiempo juntos.

-        如果你愿意照顾我,我们可以谈谈 – miro a Inari y no sé qué pensar… conversar un poco más… ¿esto es parte de mi contrato?… no sé realmente que hacer. - 如果这让你担心,我不会告诉任何人 – continúa diciendo. Que no se lo dirá a ninguna persona… ¿puedo confiar en su palabra si es tan polémico como todos dicen…?
No contesto nada, no quiero arriesgar mi trabajo por su capricho, pero lo entiendo… Debe ser muy aburrido estar enfermo y no tener con quien hablar. Me acerco y me siento al borde de su cama, me mira, su rostro esta sonrojado por la fiebre. Con mi mejor uso del idioma chino le pregunto qué quiere saber.
-        ¿Qué quieres conversar? – su rostro se ilumina y sonríe. Me contesta que todo, de donde vengo, que hago en China, porque acepté el trabajo y un sinfín de preguntas que cuando termina de hacerlas, me rio. – Esta bien.
Tiene una licencia de 2 semanas, por lo que conversación no nos faltará. Se sienta y escucha mi historia atentamente. Hace un par de intervenciones para corregirme, pero lo agradezco. Cuando estoy por retirarme para hacer las compras que me faltan del día me toma la mano… me siento un poco nerviosa, es un chico guapo, con el que no debo tener este tipo de acercamiento. Con toda la calma del mundo le pregunto que necesita. Me suelta y no dice nada. Entonces continuo con lo que iba a hacer… teniendo el corazón a mil.

¡No te puede gustar ÉL! Cap. II

Llevo un par de meses trabajando para una agencia que organiza la alimentación de los actores que están en rodaje. Es bastante sencilla, pero le va bastante bien. Trabajamos los meses que duran las grabaciones y luego esperamos a que nos llamen de nuevo.

Mi empleo es de media jornada, mientras en las tardes perfecciono mi uso del idioma chino y valido mi profesión. Mi jefe es amable y de buen trato. La vida me sonríe, pero… me gusta el drama y aún no me siento completa, extraño a mi familia y sobre todo al que fue mi compañero de vida por mucho tiempo y que la pandemia se llevó.

  • Anais, ven para acá – dice mi jefe, que es lo único que sabe decir en español.
  • ¿Qué pasa? – digo acercándome a su oficina.

Me comenta que el estudio de un actor, solicito a una persona para atender los horarios de comida de esta persona. De preferencia alguien de bajo perfil y mi jefe les habló de mí, me cuenta que les interese porque manejo poco el idioma y así no estaré molestando a esta celebridad.

  • Aunque hablara perfectamente chino, mi trabajo no es hacer vida social – le digo a mi jefe en un chino bien arcaico.

Se ríe y me consulta si aceptaré, claramente esto me entretendrá varios meses y debo viajar con el actor, que a todo esto no sé quien es. Si tomo este trabajo pausaré mis clases de idioma y mis trámites… pero es bien pagado…

  • Ok Sr. Chén, acepto.

Me da la mano cerrando el trato y me dice que tendré 5 días para preparar todo. Supongo que lo conoceré pronto, un actor que me tendrá como su sirvienta, que puede pasar…

Llego al estudio para conocer a mi empleador y afinar detalles, se han tomado la molestia de tener un traductor para que podamos entendernos mejor. Es agradable hablar con alguien que maneja mi idioma nativo, nos reímos y congeniamos bastante bien. Justo antes de comenzar la reunión me pregunta si puede tener mi line para estar en contacto y quizás salir a beber algo cuando vuelva del viaje. Acepto sin pensarlo dos veces, al final tener un amigo no está demás.

  • Ahí vienen, hay que ponerse serio… modo trabajo – dice Jian, quien sonríe y luego cambia a una actitud formal.

Me acomodo en mi puesto y arreglo mi chaqueta. Entran dos hombres altos seguido de un chico con mascarilla otro con traje y dos hombres más tras ellos. Saludan cortésmente y el chico de mascarilla y el de traje se sientan. Supongo que son mis nuevos jefes. Cuando se saca el cubrebocas no puedo evitar sorprenderme. Es un chico de mi edad, de tes muy blanca, grandes ojos cafés y sonrisa amplia… Creo haberlo visto… pero no estoy segura.

  • Él es Inari Wang- dice Jian- Te encargarás de su alimentación por el tiempo que dure el rodaje, lleva una dieta especifica porque es alérgico al gluten y lo supo hace poco. Cualquier error en su alimentación puede ser fatal y puedes ser demandada por eso.

Escucho atentamente todo lo que me dicen sin dejar de mirarlo, el me mira y sonríe tímidamente, quita sus ojos de mi mirada y vuelve a colocarse la mascarilla.

  • La última instrucción es la más importante – continua Jian- no puedes establecer ningún tipo de comunicación con él, más que lo relacionado con sus horarios de comida. No quieren ningún tipo de problemas, ya que, ha estado envuelto en algunas polémicas. Si estás de acuerdo con todo y aceptas, en 5 días podrás irte con ellos.

Cuando termina de hablar lo recuerdo, es el chico de las noticias, no tengo idea de que pasó, poco me importa y necesito este trabajo.

  • 我同意 – acepto contesto con mi mejor chino. Y estiro mi mano para cerrar el trato, pensando que el hombre de traje la estrecharía, pero no, es Inari quien lo hace y me sonríe con la mirada.

Su compañero lo mira con desaprobación, pero no parece importarle. Suelta mi mano y se va, mientras se queda el acompañante con el contrato para que lo firme. Cuando se retira Jian se relaja.

  • No pensé que Wang estaría contigo… ten cuidado, siempre está en polémicas y su fandom es bien tóxico.

Me mata la curiosidad por preguntar que pasó, pero no quiero que se me note, así que simplemente digo:

  • Cuando vuelva, y si es tan estresante como parece, salgamos a divertirnos por ahí.

Jian sonríe y se despide. Probemos que tan difícil puede ser trabajar con Inari Wang.

Fin Cap.2

¡No te puede gustar ÉL!

Se escucha de fondo mi música favorita, estoy tirada en mi sofá asimilando que llevaré una nueva vida, la pandemia y mis decisiones, me han llevado a un nuevo país, con un idioma que no manejo, pero con todas las ganas de iniciar de nuevo.

Estoy cansada por la mudanza, me he instalado con todo y ya pronto empezaré a buscar trabajo, mientras válido mi profesión y puedo comenzar a ejercerla. Quisiera que todo fuera más rápido para detener mi ansiedad, pero la vida sigue su flujo libre, sin detenerse y dejándome a mí con una sensación de inseguridad.

Tomo una botella con agua y me dirijo al balcón a mirar la vista de mi apartamento que da a la ciudad… bella, iluminada y ruidosa a la vez, no sé si podré desarrollarme, si podré superar mis perdidas y transformarme en otra persona, pero al menos estoy intentándolo.

A lo lejos siento el sonido de mi celular, seguramente mi madre quiere saber si llegue bien. Si mi pcr es negativo al llegar acá y si no me raptaron y vendieron mis órganos… Honestamente no quiero contestar… Pero se preocupará si no lo hago.

– Aló… – digo sin ningún ánimo.

– Anais 小姐,我跟她说话 – mierda, no estoy preparada para esto…

Le pido que me hable en inglés, que mi manejo de chino mandarín es muy básico. Amablemente me comienza a hablar y me comentan que envié mi currículo por internet para trabajar con una agencia que trabaja para las productoras de series, (para trabajar en lo que fuera) y me harán una entrevista la semana próxima. A grandes rasgos entiendo que cada vez que rodarán una nueva serie, los llaman y quieren personal nuevo. Acepto y confirmo que iré, que puede salir mal. Tomaré el trabajo que me ofrezcan…

Al cortar la llamada, comienzo a ponerme nerviosa… pero agregar más ansiedad no me ayuda. Enciendo la tv y veo el anuncio de un actor, muy guapo y carismático, he visto alguno de sus trabajos y también he sabido que se ha visto envuelto polémicas. No soy quién para juzgar y aunque me agrada él y su trabajo, no puedo opinar nada de su persona…

Me quedo dormida escuchando las noticias que ni entiendo… estoy agotada y aún queda mucho más por hacer.

Fin Cap.1